El poder nutritivo y curativo de plantas como la Chía, la Moringa y la Flor de Jamaica

Quienes han tenido la oportunidad de compartir talleres, seminarios, consulta profesional, o simplemente una conversación informal sobre temas diversos, saben mi filosofía sobre la salud.

Para comenzar, siempre mantengo que la salud es un estado, que viene de dentro de nosotros. Es allí en nuestra inteligencia innata que se encuentra de manera concentrada, como el mejor de los elixires, el potencial de salud.

La salud no se compra en la farmacia de la esquina, ni la encontramos en aquel doctor en el que confiamos, ni en aquellos suplementos naturales que tan de moda se han puesto.

Ésta, sólo la encontraremos en nuestro interior y en la medida que mantenemos un equilibrio en la manera de administrar nuestra vida. Ese equilibrio se encuentra en una buena nutrición, en darle un tiempo de calidad al descanso del cuerpo, en mantener sano el sistema nervioso central, en la manera de ejercitar nuestra cuerpo y en el equilibrio de nuestros pensamientos.

Dentro de la buena nutrición, podemos aportarle al cuerpo, los beneficios de algunos de los productos que nos regala la madre Naturaleza.

En este caso les presento 3 de estos regalos:

MORINGA- Es una planta originaria de Asia, especialmente de la India,  que se da en climas tropicales y subtropicales. Sin embargo, hay diferentes especies dentro de la moringa, dependiendo de las regiones de donde provenga.

En la actualidad el uso de Moringa se ha extendido por sus grandes propiedades nutricionales, que ha llevado a la Organización Mundial de la Salud y a la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura, FAO, a designar esta planta como alimento de primer orden en el mundo. Dicen estas mismas fuetes que esta planta puede terminar con el hambre en el mundo. Hay fuentes que indican que la ingesta de tres hojas diarias del "árbol de la vida" como también se lo conoce, aporta los nutrientes que el cuerpo necesita en un día.

Tiene propiedades anti-virales, anti-inflamatorios y anti-envejecimiento y previene un sin fin de enfermedades ocasionadas por la ausencia de elementos esenciales en la dieta.

Todas las partes de la planta son comestibles. El contenido de proteínas, vitaminas y minerales es sobresaliente. Se ha utilizado a la moringa en programas gubernamentales en África y Asia (India, Mauritania, Senegal) para apoyar regiones con alto nivel de desnutrición.

Las hojas y vainas de Moringa oleífera son un recurso extremadamente valioso de nutrición para personas de cualquier edad.

Niños desnutridos pueden beneficiarse del consumo adicional de las hojas de la Moringa en su dieta. La alta concentración de hierro, proteínas, vitaminas varias y aminoácidos esenciales presentes en las hojas de la Moringa, hacen de ella un suplemento nutricional ideal.

Un estudio sobre el valor nutritivo de las hojas de Moringa indica que éstas contienen una riqueza de nutrientes esenciales que evitan enfermedades. También  arrojó que estas tienen una alta concentración en aminoácidos esenciales, algo que es poco común en una planta. Dado que las hojas secas son concentradas, contienen grandes cantidades de nutrientes varios, y muy rica en vitamina C.

La lista de los minerales presentes en la moringa es larga y entre los más importantes están incluidos el calcio, cloruro, cromo, cobre, flúor, manganeso, magnesio, fósforo, potasio, selenio, azufre, zinc.

• El Calcio es uno de los Minerales más importantes para el crecimiento, el mantenimiento y la reproducción del cuerpo. Así como en la  coagulación de la sangre, en la transmisión de los impulsos nervios, en la contracción y relajación de los músculos, en el latido normal del corazón, en la estimulación de la secreción de hormonas, en la activación de la reacción de las enzimas, como también en otras funciones, que requieren  pequeñas cuantidades de Calcio. La Moringa es la fuente más rica de Calcio encontrado en material vegetal y posee 17 veces más calcio que la leche, ayuda a prevenir la osteoporosis durante la vejez y refuerza los huesos de los jóvenes y los de mediana edad. 
• La Moringa, con 23 veces más Hierro que las espinacas, ayuda en la formación de hemoglobina y mioglobina, los cuales llevan el oxigeno a la sangre y los músculos. El Hierro también forma parte de muchas proteínas y enzimas en el cuerpo. Su deficiencia produce la debilitación del sistema inmunológico, mientras que su consumo ayuda a mejorar la agilidad mental, ya que aumenta el abastecimiento del oxigeno hacia el cerebro.
• Contiene vitamina A, el grupo de vitaminas B, C, E y K, así como  ácido Fólico, 18 aminoácidos, 46 antioxidantes y más de 90 nutrientes. Los antioxidantes proporcionan los átomos libres que el cuerpo necesita y reducen el efecto de los Radicales Libres. Esta propiedad antioxidante ayuda a la prevención de formaciones malignas. También juegan un papel importante en controlar los síntomas del proceso de envejecimiento y mejoran la salud cardiovascular.

CHÍA-  es una planta originaria de México, que se cultiva también en Guatemala y Bolivia, ya que crece en climas tropicales o subtropicales. Su cultivo en el valle de México, se remonta a unos 3.500 años a.C.

En la época pre-colombina la Chía era uno de los 4 alimentos básicos de las civilizaciones Mayas y Aztecas.  Sus semillas eran la base de su alimentación y en la elaboración de medicinas y ungüentos de belleza.

En la actualidad, las semillas de Chía han recobrado gran importancia por su interés nutricional, ya que la ciencia ha demostrado que éstas son una importante fuente de ácidos grasos Omega-3, antioxidantes, proteínas, vitaminas, minerales y fibra. Junto a ello, se sabe que la Chía no contiene gluten. Es preciada por su alto contenido en fósforo, calcio, magnesio, potasio, hierro y selenio.

El consumo de Chía, ayuda a controlar los niveles de colesterol y la tensión arterial, facilita la digestión y el tránsito intestinal, ayudan a controlar el apetito por su efecto saciante. Ayuda al sistema inmunológico y a controlar los niveles de azúcar. Así como, favorece el desarrollo muscular y la regeneración de tejidos. Aporta vitaminas del grupo B, A y E.

Es destacable también su bajo contenido en sodio.

FLOR DE JAMAICA. Esta planta originaria de África tropical, pero que debido a sus propiedades medicinales, se ha extendido su cultivo en México, América Central y en el sur asiático, es lo que por su nombre científico se conoce por Hibiscus sabdariffa.

Investigaciones científicas han comprobado que la Flor de Jamaica tiene una variedad de efectos positivos sobre la salud humana. Se sabe que la Jamaica es rica en una variedad de antioxidantes que son la causa del color rojo intenso que desprende la flor. Además es muy rica en  vitamina A y C, una gran cantidad de minerales, acido cítrico y málico entre muchos otros componentes. Los antioxidantes que se encuentran en esta flor hace de ella un alimento que puede ayudar a combatir varias enfermedades, como es combatir los niveles altos de colesterol (LDL).

Es un coadyuvante en la regulación de la presión sanguínea, propiedad que hace de la Jamaica un alimento ideal para la gente que padece niveles elevados de colesterol y para la gente hipertensa.

Según estudios realizados en la Universidad de Míchigan, durante el 2004 se encontró que la ingesta diaria de  una infusión de Flor de Jamaica regula la producción de insulina, propiedad que lo hace un alimento de alto valor para la gente que sufre de diabetes.

Otro estudio realizado en la Universidad de Pittsburgh, USA durante 1990-2004 reveló que combate las células malignas de varias formas de cáncer sin afectar las células sanas. De ahí la importancia de su consumo para aquellas personas interesadas en prevenir cualquier tipo de mutación celular.

Aparte de las anteriores propiedades, la Flor de Jamaica es rica en sales minerales haciendo de ella una bebida hidratante ideal para deportistas y en caso de deshidratación por exceso de ingesta de alcohol o fiebre. La Flor de Jamaica es diurética, ideal para la gente que tiende a retener líquidos o que padece problemas renales, ayuda a la eliminación de lípidos y líquidos por lo que juega un papel a la hora de controlar el peso corporal. La Jamaica también es un relajante que no produce sueño sino que nivela el sistema nervioso central ayudando a controlar el estrés, permitiendo así un descanso natural. Por su sabor, color, por ser refrescante y fácil de preparar, la Flor de Jamaica es una alternativa sana para sustituir las bebidas gaseosas y azucaradas.